martes, 6 de noviembre de 2012

Procedimiento del teñido con Betarraga



Que materiales se utilizan:
·      Betarraga o remolachas (1kilo).
·      Un frasco de Alcohol.
·      Fuentes o bateas.
·      Cuchara de madera.
·      Cuchillo pequeño.
·      Colador.
·      Plancha (si fuera necesario).
Procedimiento:
1.    Elegidas y lavadas las betarragas, se corta en rodajas.
2.    Se colocan las rodajas de la betarraga en la fuente.
3.    Diluir en la fuente con la betarraga el alcohol doméstico.
4.    Dejar que el alcohol se disuelva allí por media hora, hasta que la mezcla se torne del color de la betarraga.
5.    Si se requiere que el líquido se tiña con mayor efectividad y en el menor tiempo, aplastar la betarraga contra el fondo de la cacerola, con ayuda de la cuchara.
6.    Escurrir bien las betarragas, quedando el líquido resultante que emplearía para teñir en una prenda o papel ( en mi caso se trata de una prenda).

Los Secretos del teñido textil indígena



PILAR ESPINOSA

Que las betarragas no sólo sirven para una ensalada lo sabe mejor que nadie Elisia Lemunao. Vive en Llamuco Bajo, cerca de Pillanlelbún, en La Araucanía, y como muchas mujeres mapuches de mediana edad, creció entre husos, telares, lanas y tintes de colores.
De la misma agua en que hierve las betarragas saca un color muy vivo y fácil de conseguir, porque ella misma las cultiva en su huerto.
Para lograr tonos verdes, hierve hojas de quila y para el rojo utiliza flores y follaje de notros. También aprovecha las raíces, frutos, hojas, corteza y flores del maqui, boldo, nalcas, ciertos líquenes, chilcos y fucsia.
Son algunas de las especies que dan colorido a los tejidos artesanales mapuches y no es mucho más lo que actualmente se ocupa. Lo que cambia las tonalidades son las proporciones y las mezclas, en un proceso que requiere paciencia.

El Teñido Natural


El proceso del teñido natural se basa en colores sacados de la vegetación y de los minerales presentes en la naturaleza, según las técnicas indígenas que se han traspasado por generaciones. Escondidos en la corteza, las hojas, raíces y a veces las flores, se encuentran colores que, luego de ser hervidos, penetran la lana para no salir más. Esa es la ventaja del teñido natural: es eterno y único. 

Cultivo de la Remolacha de Mesa




Suelo:
Igual que otros cultivos de raíces, las remolachas necesitan un suelo fértil (especialmente alto en potasio) para su crecimiento vigoroso.
Siembra:
Los surcos tendrán de 2 a 3 cm de profundidad y 30 cm de separación.
La siembra debe hacerse aproximadamente a mitad de septiembre en el Hemisferio Norte.
Tallos débiles, es a menudo el resultado de plantar demasiado profundo o cuando el suelo forma una costra después de una lluvia fuerte.
Cuando eso sucede, las plantas pueden emerger en un período de tiempo relativamente largo, provocando diferentes tamaños y edades de plantas en el semillero.
Las remolachas son bastante resistentes a las heladas y pueden ser plantadas en el huerto 30 días antes de que terminen las heladas.
Aunque las remolachas crecen bien durante tiempo caliente, el semillero se establece más fácilmente en condiciones frescas y húmedas.
Establezca plantaciones en escala, con 3 a 4 semanas de intervalo hasta la mitad del verano, para que tenga una constante fuente de remolachas frescas, blandas y un poco tiernas.
Las variedades de germinación única evitan el aclarado, ya que dan lugar a una sola planta.
Las variedades más pequeñas necesitan entre 8 y 12 semanas para madurar, entre 14 y 16 en el caso de las normales.
Remojar en agua las semillas durante una hora para propiciar la germinación.
Sembrar 1 mes antes de las últimas heladas y repite la operación cada 4 semanas hasta mediados del verano.
Sembrar a 2 cm de profundidad en hileras separadas 25-30 cm.
Aclarar de forma que haya entre 10 y 15 cm entre plantas.
Cavar la tierra y a continuación acólchala con compost o retazos de hierbas.
Regar cada 2 ó 3 semanas en tiempo seco y recoge las primeras remolachas cuando midan 5 cm de diámetro.
Riego:
Necesita un buen riego, la sequía es uno de los factores de más daño para la planta.
Mantenga sus plantas de remolacha con una humedad uniforme para su mejor rendimiento.
Aporcado y malas hierbas:
Aporcar (poner tierra al lado de las plantas) frecuentemente es importante, porque las remolachas no compiten bien con las malas hierbas, especialmente cuando son pequeñas.
Debido a que las remolachas crecen muy cerca de la superficie, desyerbado manual y temprano, aporques frecuentes y superficiales son los métodos más eficaces para controlar malas hierbas entre filas (surcos).
Si se remueve la tierra profundamente, para quitar las malas hierbas, puede dañar a las remolachas.
Conservación:
Al almacenarlas, las hojas de la remolacha absorben el agua de la remolacha, reduciendo su sabor; y las remolachas se ponen como deshidratadas.
Deje una pulgada de tallos a la remolacha y no lastime el bulbo, para conservar la humedad y los nutrientes.
Después de cortar las hojas, las remolachas se pueden almacenar bien por una semana en bolsas plásticas con agujeros y en el refrigerador.
Las remolachas pueden ser congeladas, conservadas (en frasco o latas) o conservadas en vinagre, o cuando se secan se tienen buenos resultados.
Las remolachas pueden ser almacenadas en una bolsa de polietileno en refrigerador por varias semanas.
Las remolachas también pueden ser almacenadas en hoyos al aire libre si se entierran antes de que la tierra se congele en el otoño.
No permita que se congelen.


Teñir con Betarraga


Bueno este proyecto es de gran utilidad para la familia: el uso de un tinte vegetal para teñir algunas prendas de vestir.

Composición química de la remolacha o betarraga:

Las hojas (cuello) de la remolacha son una fuente excelente de vitamina A y las raíces (remolachas) son una buena fuente de vitamina C.


  • Agua 89%
  • Hidratos de carbono 6, 4% (fibra 3, 1%)
  • Proteínas 1, 3%
  • Lípidos 0, 1%
  • Potasio 392 mg/100 g
  • Sodio 73 mg/100 g
  • Fósforo 41 mg/100 g
  • Calcio 23 mg/100 g
  • Vitamina C 10 mg/100 g